sábado, 31 de octubre de 2015

Chéjov: el destino del hombre

Gustave Caillebotte. Rising Road (1881).
Escúcheme. A lo largo de mi existencia he sufrido mucho; tanto que, al recordarlo, me da vértigo, y solo ahora he comprendido, con el cerebro y con el alma dolorida, que el destino del hombre no es nada o es amar al prójimo hasta la abnegación y el autosacrificio. ¡Ese es el sendero que hemos de seguir, ese es nuestro destino! Y esa es mi religión.


Antón Chéjov. Relato de un desconocido (1893).

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