sábado, 10 de noviembre de 2012

Augusto Monterroso: la verdadera Penélope

John William Waterhouse. Penélope y los pretendientes (1912).

Hace muchos años vivía en Grecia un hombre llamado Ulises (quien a pesar de ser bastante sabio era muy astuto), casado con Penélope, mujer bella y singularmente dotada cuyo único defecto era su desmedida afición a tejer, costumbre gracias a la cual pudo pasar sola largas temporadas.
   Dice la leyenda que en cada ocasión en que Ulises con su astucia observaba que a pesar de sus prohibiciones ella se disponía una vez  más a iniciar uno de sus interminables tejidos, se le podía ver por las noches preparando a hurtadillas sus botas y una buena barca, hasta que sin decirle nada se iba a recorrer el mundo y a buscarse a sí mismo.
  De esta manera ella conseguía mantenerlo alejado mientras coqueteaba con sus pretendientes, haciéndoles creer que tejía mientras Ulises viajaba y no que Ulises viajaba mientras ella tejía, como pudo haber imaginado Homero, que, como se sabe, a veces dormía y no se daba cuenta de nada.

Augusto Monterroso. La tela de Penélope en La oveja negra y demás fábulas (1969).

4 comentarios:

  1. Curioso microrrelato. Una que teje pero que no teje, y uno que viaja pero que no viaja. Con razón Ulises le prohibía ir a tejer... Me gusta la pintura, tienes muy buen gusto para elegirlas.


    Un beso =)

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    1. A mí también me gusta esa pintura. Con este fragmento encontré el momento adecuado para colocarla en el blog.

      Un beso.

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  2. Nunca me habría detenido a pensar de esta manera en el comportamiento de Penelópe y Ulises, genial escrito, gracias por compartirlo con nosotros.

    Saludos.

    Oh, confieso que este mensaje lo escribí hace varios días, pero resulta que nunca hice la comprobación. Mil disculpas.

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    1. Pareciera que el autor habla de una pareja desgastada del siglo XX o XXI. Es original.

      Saludos, me alegra que te haya gustado el fragmento.

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