martes, 20 de marzo de 2012

Sabato: las lecciones de Fernando Vidal

Mural en Pompeya. Sátiro y ménade. Siglo I.
Una maestrita, Norma Gladys Pugliese, a la que utilicé durante algunos meses para estudiar ciertas reacciones de intelectuales de suburbio, pensaba, naturalmente, que el odio y las guerras entre los hombres eran debidos al mutuo desconocimiento y a la ignorancia general; tuve que explicarle que la única forma de mantener la paz entre los seres humanos era mediante la ignorancia recíproca y el desconocimiento, únicas condiciones en que estos bichos son relativamente bondadosos y justicieros, ya que todos somos bastante ecuánimes con relación a las cosas que no nos interesan. Con algunos libros de historia y con la sección policial de los diarios de la tarde en la mano, me veía obligado a explicarle el ABC de la condición humana a esta pobre diabla que se había educado bajo la dirección de distinguidas educadoras y que creía, más o menos, que el alfabetismo resolvería el problema general de la humanidad: momento en que yo le recordaba que el pueblo más alfabetizado del mundo era el que había instaurado los campos de concentración para la tortura en masa y la cremación de judíos y católicos. Con el resultado, casi siempre, de levantarse de la cama, indignada contra mí, en lugar de indignarse con los alemanes: ya que los mitos son más fuertes que los hechos que intentan destruirlos, y el mito de la enseñanza primaria en la Argentina, por disparatado y cómico que parezca, ha resistido y resistirá el ataque de cualquier cantidad de sátiras y demostraciones.

Ernesto Sabato. Informe sobre ciegos en Sobre héroes y tumbas (1961).

4 comentarios:

  1. La pobre Señorita Norma Gladys Pugliese, la compadezco =P Tener que soportar las excentricidades y, hasta en cierto sentido, la locura que rodeaba a Fernando Vidal Olmos. Y aun así permanecer a su lado en todo momento a pesar de los desplantes y la falta de consideración que éste le mostraba. Es increíble como puede reducirte la visión, hasta el punto, en ocasiones, de la ceguera total, el amor auténtico e incondicional. A veces vivir junto a un "genio" tiene esos "efectos secundarios" es un riesgo que hay que correr =P

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    1. Muchas mujeres son propensas a experimentar esa dependencia emocional. A veces se encuentran con un hombre que no les brinda amor pero sin embargo ejerce en ellas una poderosa atracción. Entonces se dan relaciones como la que se desprende del fragmento. :)

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  2. Seguramente que Sábato, por cuestiones ideológicas, no debe haber estado de acuerdo con el pensamiento de Domingo F. Sarmiento y su fe en la educación de todos los habitantes de este o de otro país. Sarmiento tuvo un pensamiento optimista de crecimiento indefinido de la Argentina, aunque murió en Paraguay en el exilio y bastante desilusionado porque no se había cumplido su sueño. Además, la docencia argentina de la época de Sábato fue formada en el optimismo sarmientista y en este personaje parece hablar Sábato que era un poco "izquierdoso". Yo apoyo la idea de que la escolarización de todos los habitantes es fundamental para evitar la marginalidad. A la educación se le deben sumar los valores morales (en desaparición) para no caer bajo las garras de los dictadores. Aunque el ser humano siempre se vende al mejor postor y los políticos los compran con la demagogia, luego, todo se corrompe. Ya ocurría esto en la democracia griega y ocurre ahora. Las personas somos muy complicadas y parece no gustarnos vivir en libertad con responsabilidad. Hay muchos ejemplos en nuestra Hispanoamérica y el resto del mundo. Saludos.

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    1. La libertad con la responsabilidad debieran ser indesligables. A veces parece difícil conciliarlas pero creo que aquella conciliación es un requisito indispensable para poder vivir sin ser oprimidos y a la vez sin oprimir a los demás.
      :)

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